Oficina en casa, cómo integrarla con tus espacios

Hoy por hoy nos hemos visto obligados a trabajar en casa, la nueva situación conlleva un cambio de mentalidad y las viviendas se han convertido en improvisadas oficinas debido al confinamiento por el coronavirus, pero esto no tiene que convertirse en un problema sino en todo lo contrario. Es una oportunidad de aprender a trabajar en otro ambiente del que también podemos sacar el máximo provecho.

 

Comodidad, positivismo, motivación, bienestar… estas son algunas de las características ideales que debe tener un espacio de trabajo. Si ese espacio además lo tienes que crear en casa lo mejor es optar por un lugar tranquilo, lo menos ruidoso posible, que invite a aflorar tu creatividad y sobre todo, que ayude a tener jornadas productivas. 

 

No hacen falta grandes espacios, lo importante es sentirse cómodo y motivado, así que cualquier rinconcito de la casa puede ser perfecto. Eso sí, algunos de los consejos que los expertos proponen siempre son: tener una silla cómoda, que el espacio que se elija sea luminoso, que tenga estanterías o espacios de almacenamiento que permitan tener los documentos y papeles en orden. Y por supuesto, darle el toque personal, súper importante para sentirnos 100% nosotros a la hora de desempeñar las tareas.

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Crear una oficina en casa, es todo un arte. Tiene que ser funcional, práctica, bonita, y sobre todo, que nos haga sentir bien, y nos invite a pasar mucho rato en ella.

 

Se debe buscar un lugar tranquilo de la casa y lo más insonorizado posible, esto favorecerá la concentración y evitará las distracciones. Pero también se debe asegurar de que se va a tener una buena conexión a internet y enchufes cerca para conectar los equipos.

 

Trabajar en casa tiene muchas ventajas, pero también algunos inconvenientes: es muy fácil distraerse, hay que saber cómo administrar el tiempo, y sobre todo, no caer en tentaciones como levantarse tarde o terminar de ver una serie.

 

Se podría decir, que trabajar en casa… ¡es todo un arte!

Es muy fácil sucumbir a la tentación de trabajar en la mesa de la cocina, el comedor o incluso desde el sofá, pero ciertamente no es muy buena idea en términos de concentración y productividad, especialmente si se tienen niños o más familiares cerca. Es hora de definir y diseñar una zona concreta para que puedas teletrabajar de manera cómoda y eficiente. Te daremos una serie de consejos y tips que te darán las claves para crear la oficina en casa perfecta.

 

Los consejos que te ofrecemos tendrás que adaptarlos a tus circunstancias y necesidades personales y familiares.

 

Antes de empezar, dos preguntas son las que debe hacerse uno antes de instalar una oficina en la casa? ¿Cuanto espacio necesito?, No todos hacemos lo mismo. Necesitas mucho espacio de almacenamiento (papeles, lápices, libros, documentos) e instalar una impresora, por ejemplo. O solo con el computador y ya.

 

Y la pregunta del millón: ¿En qué lugar?, Lo ideal sería una espacio separado, donde no haya mucho ruido y nos permita aislarnos mentalmente. Pero como no siempre se puede hacer esto, con un poco de creatividad e ingenio, y algunos objetos cuidadosamente seleccionados, se puede crear un lugar de trabajo en cualquier habitación de la casa.

 

¿Es mejor en el dormitorio o en el salón? Eso dependerá de nuestra rutina diaria, de cuantas personas viven en nuestro hogar, de los horarios en que estarás trabajando…se debe pensar en todo ello con detenimiento. Teniendo en cuenta los horarios en que habitualmente se usara la oficina, ¿cual es la mejor zona para ubicarla? También es importante sentirse cómodo por eso, valora todas las opciones posibles y escoge la mejor para ti.

Les mostraremos los espacios mas representativos para ubicar su oficina en casa:

 

A. Espacio de trabajo en las habitaciones

 

Se puede integrar un espacio de trabajo en la habitación eligiendo muebles y accesorios a juego con la decoración que se tiene.

 

No es lo más recomendable según los expertos en descanso, pero a muchos les gusta tener un lugar en el dormitorio donde puedan trabajar un rato en silencio y en paz. Si la habitación es grande, se puede apropiar de una pared para incorporar escritorio, estantes y un mueble con gavetas para tener todo bien ordenado.

 

Lo ideal es que las otras personas que habitan el hogar como los hijos, también tengan su propio escritorio o lugar de estudio, ya que no utilizarían la oficina y así se evitarían distracciones perjudicándote la concentración.

B. Oficina en una habitación o espacio independiente

 

Cuando las oficinas en casa se convierten en un espacio o habitación completamente independiente, también llamados estudios o despachos. Este tipo de oficinas son ideales para quienes trabajan en casa, pero sostienen reuniones con clientes, pacientes o alumnos, dependiendo de la profesión. Es recomendable dividir estos espacios en áreas. El escritorio, una mesa de reuniones y una pequeña salita, si los metros los permiten. Una decoración que se vea profesional, pero al mismo tiempo acogedora, es el equilibrio perfecto.

C. Oficina en el salón de casa

Las salas de estar, también son muy populares para instalar una oficina en casa. El único problema, es que si tienes mascotas o niños pequeños, tendrás ruido, pero si puedes lidiar con ello… ¿por qué no?

 

Puedes robarle un rincón a la sala e improvisar un lugar de trabajo encantador, que más que restarle a la sala, le sume. Un pequeño espacio de trabajo con un escritorio y con estantes incorporados, se puede integrar de manera tan perfecta en la decoración del salón de casa, que ni siquiera lo notarás.

 

Estos escritorios también se pueden ver integrados al mueble que se tiene de estar de televisión o de las bibliotecas, normalmente se usa cuando el salón no es muy grande, para poderlo tener todo en uno. Pero podría ocasionar mayor distractivo ya que se tendría el televisor al lado del escritorio.


Otra opción para el salón, es si tienen espacio, aprovechen la trasera del sofá para apoyar el escritorio. Se estará delimitando espacios sin separarlos.

D. APROVECHA HUECOS MUERTOS, UN RINCÓN TRANQUILO

 

Si no dispones de demasiado espacio, aprovecharlo al máximo debe ser su lema. Se pueden encontrar mesas de medidas muy diferentes o pensadas para aprovechar las esquinas y de esa manera sacarle el máximo rendimiento al espacio. Así que no se desanimes si el espacio es pequeño. Busca y seguro encontrarás una solución adecuada que te ayudará a crear tu oficina en casa. En espacios pequeños es siempre mejor apostar por colores claros en todos los elementos, incluido la mesa para así que de sensación de mayor amplitud.

 

Con la imagen inferior izquierda , les damos una idea muy decorativa y a la vez ideal para aprovechar cada centímetro de la casa. Con una mesa y dos estantes de MDF pintado de blanco, este estudio ocupa apenas 1 metro cuadrado. Tanto la mesa como los estantes se adaptan a la columna de la pared, dando se uso al hueco que quedaba muerto entre ésta y un módulo de armario.

E. PARA DOS O MÁS

Una mesa en “L” es la solución cuando se necesita compartir espacio de trabajo. Arrimada a la pared y formando un ángulo recto, la mesa aprovechará al máximo los metros y dejará libre el espacio central.

 

Pero también para compartir puede ser una superficie recta pero lo suficiente mente grande para que no queden estrechos al momento de usar el espacio.

 

6 TIPS PARA MONTAR UNA OFICINA EN CASA

 

1. ELEGIR EL LUGAR CON MEJOR ILUMINACIÓN


Una regla básica para crear la oficina en casa será decidir su ubicación en función de la luz. Por las mañanas la iluminación debe ser intensa y natural, pues el cuerpo necesita producir melatonina (hormona reguladora del sueño) y la manera más eficaz de hacerlo es con la luz del sol.

 

La luz natural es muy importante para la vista. Trata de orientar la computadora no dando la espalda a la entrada de luz ya que su reflejo deslumbrará. Lo mejor es que la luz entre, a ser posible, por la izquierda (o la derecha si eres zurdo), de forma que cuando caiga la tarde, ni el sol ni su reflejo interrumpan la labor y te obliguen a aumentar el brillo o cambiar de lugar, lo mismo para la iluminación artificial si se trabaja por la noche.

Además se debe usar cortinas finas o semitransparentes y de colores claros que ayuden a perder el mínimo de luz natural. La orientación de la habitación también es importante a la hora de sacarle el máximo provecho a la luz natural. Pero si no se dispone de suficiente o simplemente trabajas en horas que no hay suficiente luz solar, usa las lámparas. Son un elemento muy importante para ayudarnos a trabajar mejor, con mayor energía y sin perjudicar a nuestra vista. Las lámparas tipo flexo no pueden faltar en una oficina para aportarnos la luz puntual que se necesita. Así como una buena iluminación general.

2. TENER ESPACIO DE ALMACENAMIENTO


Otro punto muy importante a la hora de montar una oficina en casa es el almacenamiento. Una oficina genera toda una serie de material que no se querrá tener siempre encima de la mesa, por ello es necesario incluir al menos una cajonera en la mesa de escritorio o junto a ella. Allí se podrá guardar los elementos que se usa a diario y que no se quiere que estén por encima, así como guardar la documentación o papeles que necesites. Pero además se necesitara también estanterías o armarios para guardar otro tipo de material que puedas necesitar como libros, carpetas, archivadores, etc…

Siempre es mejor tener todo a la mano cuando trabajas, así que se debe intenta ubicar la mesa cerca de la zona de almacenaje para ahorrarte continuos viajes mientras se esta trabajando y para que la tarea sea más fluida.


Una buena idea es aprovechar el espacio en vertical utilizando estanterías en las paredes encima de la mesa de trabajo, si es posible y no dispones de mucho espacio. Si no las estanterías de pie también pueden ser una buena solución.

Organización y orden


Mantener el material organizado para tenerlo al alcance cuando se necesite puede ayudar durante el teletrabajo. Se pueden poner entrepaños en la pared, estantes, cajas… y así conseguir una estantería personalizada. Ser inteligente a la hora de ordenar la mesa y situar en los espacios que están más a mano lo que se utiliza más a menudo. Además, se puede utilizar etiquetas para encontrar rápidamente las cosas. Y cuando se acabe la jornada laboral, es recomendable guardar todo en su sitio para desconectar la mente y poder descansar.

 

El tiempo es oro, así que no lo pierdas buscando papeles que no sabes dónde los dejaste por última vez. Clasifica, etiqueta.

3. CÓMO DECORARLA?


La decoración de la oficina en casa es un proyecto muy divertido. Es importante adaptar la practicidad a la estética. Pensar en lo que nos inspira y nos gustaría tener cerca mientras trabajamos, esa es la mejor parte, ya sean fotografías, obras de arte, piezas vintage o antiguedades y adornos alusivos a nuestra profesión, la idea es un espacio que refleje nuestra personalidad y nuestro trabajo.

El orden es fundamental para trabajar en buenas condiciones y que fluya la concentración y la creatividad. Se debe tomar el tiempo necesario para organizar el espacio de trabajo de manera que ayude a mantenernos concentrados y ayúdate de elementos que permitan el almacenaje y la clasificación del material y documentos de forma sencilla e invisible: archivadores, organizadores, tableros y moodboards para colgar imágenes inspiradoras, notas y fotos, de tal manera que decoren la oficina al gusto, definiendo en él, el estilo y personalidad. También se puede colocar objetos y elementos decorativos que nos traigan buenos recuerdos y nos llenen de energía positiva.

Ten a la mano libros y material de trabajo


Si tu trabajo requiere que consultes libros, planos, o necesites tomar algún objeto cercano al mismo tiempo que estás frente a la computadora, encárgate de que el espacio es lo suficientemente amplio como para tenerlos al alcance de la mano.

 

Mientras diseñas tu espacio de home office, piensa en tu proceso de trabajo y coloca tus demás instrumentos a menos de un metro de distancia de ti. Si elegiste una silla con ruedas, esta tarea será aún más sencilla.

4. ESCOGER BIEN LOS COLORES


Otro factor a tener en cuenta a la hora de diseñar la oficina en casa son los colores. El color con que se pinta nuestro entorno influye en nuestro estado anímico y en nuestro rendimiento, Por eso para una oficina se recomiendan colores claros aunque también podemos apostar por algunos toques de color que nos aportarán energía y dinamismo.

Para facilitar la calma y la concentración, es importante estar en un ambiente que no sea muy estridente. Las paredes deben ser de un color que te motive y te inspire a la hora de ponerte a trabajar. También es aconsejable guardar una armonía cromática con el resto de los muebles y elementos de tu oficina. El blanco nunca falla y ayuda a que el espacio se vea limpio y despejado, el que más favorece la concentración es el azul y algunos detalles en rojo y naranja estimulan la creatividad.

 

Los colores verde y azul pastel también pueden ser una gran idea a la hora de decorar las paredes de la oficina en casa. Son colores relajantes que nos recuerdan a los espacios abiertos y que nos ayuden a estar serenos y concentrados.


El azul tiene un efecto calmante porque se asocia con el cielo y el mar, además ayuda a aumentar la creatividad. Cuando nos sintamos bloqueado, debemos elegir el verde. Nos ayuda a la creatividad, y si se mezcla con el azul (por ejemplo en tonos aqua o por separado) se encontrara la combinación ideal.

 

Los colores neutros en las paredes y el suelo, combinados con madera natural, corcho, plantas y algún tipo de textil, como mantas, cojines o alfombras, crearán un espacio de trabajo sencillo, pero muy acogedor.

5. HOLA PLANTAS, ADIÓS RADIACIONES

 

¿Sabías que colocar una pequeña planta en el escritorio puede volvernos más productivos? Así es, la simple presencia de las plantas puede traernos sorprendentes beneficios: convivir con plantas y flores frescas puede ayudar a sentirnos más saludable y con más energía para realizar las actividades diarias ya que mejora la atención y concentración provocando que nos volvamos más productivos, además de hacer nuestro escritorio mucho más fresco y bonito.

 

Además de la ventilación, las plantas funcionan como fábricas de oxígeno que eliminan la concentración de gases nocivos en el ambiente y añaden un toque verde muy necesario a cualquier oficina en casa.
Las plantas tienen efectos muy positivos: desde prevenir el cansancio, reducir el estrés, motivar la atención y purificar el aire contaminado de la oficina. Más oxígeno al cerebro, más creatividad.

Acerca tu maceta favorita a tu zona de home office, coloca ese terrario de suculentas en la misma ventana que te da luz o tus plantas de interior sobre tu nuevo escritorio. Un par de plantas pueden ayudar a convertir un espacio de trabajo en un sitio acogedor en contacto con la naturaleza.

 

¡Qué haríamos sin las plantas y su frescura! Los cactus, la hiedra o la diefembaquia son muy eficaces contra las radiaciones y las ondas electromagnéticas, así que rodiemonos de ellas. Escoge las plantas saludables. Dan más oxígeno del que consumen y eliminan las sustancias nocivas del aire. Conoce las 10 plantas campeonas de la limpieza y el lugar estratégico dónde colocarlas para aprovechar todos sus beneficios.

1. ARECA, JUNTO A LA VENTANA ES MÁS EFECTIVA
Si se cuenta con bastante espacio, elige una areca grande, porque la capacidad de limpiar el aire de esta palmera es proporcional a su tamaño. ¿Qué limpian? De 12 a 18mcg de xileno la hora, y entre 10 y 20 de tolueno. Combínala con plantas medias, como hiedra, filodendros o helechos.

 

2. DRÁCENA, PARA DESPUÉS DE PINTAR
Su característico tronco y sus hojas alargadas son muy indicados en habitaciones recién amuebladas o pintadas porque filtran el formaldehído y el xileno, entre otros. En la habitación del bebé, favorecerá su descanso. Agradecida y poco exigente, hay muchas variedades de drácena. Soportan bien los riegos irregulares, ya que sus tejidos retienen el agua. Puedes combinar varias o compensar su verticalidad con una planta con caída, como el potos.

 

3. FICUS, MENOS RUIDO Y ALERGIAS EN CASA
Resistentes y fáciles de cuidar, por su porte quedan bien solos o acompañados por plantas colgantes o delicadas flores. Crecen con luz y semisombra. Limpian las sustancias nocivas de productos de limpieza o adhesivos, que causan alergias y dolores de cabeza, y atenúan de manera natural los ruidos. Necesitan un sustrato ligero y aireado para potenciar su capacidad de purificación, ya que las raíces realizan parte importante del proceso.

 

4. ESPATIFILO, ELIMINA LA MAYORÍA DE SUSTANCIAS
Muy decorativa y fácil de mantener, sus elegantes flores blancas florecen todo el año. Necesita luz, aunque vive bien con poca claridad. Le gusta la humedad en el aire, pero no el riego excesivo. Limpia muchas de las sustancias contaminantes del aire como el formaldehido, presente en pinturas y colas. También es efectiva contra el benceno, la acetona o el tricloroetileno. Combínala con plantas que realcen sus flores en un conjunto de verdes y blancos floridos.

 

5. PALMERA DE SALÓN, TE AYUDA A RESPIRAR MEJOR
Limpia prácticamente todos los tóxicos del aire, especialmente el formaldehído, el xileno, el amoníaco o el benceno, responsables de afecciones respiratorias en bronquios, pulmones y mucosas. Vive bien tanto en el baño, porque le gusta la humedad, como en el dormitorio, donde te ayuda a respirar y dormir mejor. Búscale un lugar con luz tamizada. Queda bien en composiciones de plantas pequeñas con kalanchoe, espatifilo y hiedra, aportando verticalidad.

6. FILODENDRO, PARA EDIFICIOS ENFERMOS
Eliminan el formaldehído, un tóxico muy abundante en interiores, cuya exposición prolongada a baja concentración puede causar el síndrome de los “edificios enfermos”, provocando dolores de cabeza, cansancio, alteraciones cutáneas… Son plantas vigorosas y agradecidas que necesitan riego regular y viven bien tanto con luz como en semisombra. Úsalos para dar fuerza a una composición, a base de helechos y potos, o para crear un muro verde de aspecto selvático en la pared.

 

7. CINTAS, ELIMINAN EL 96% DEL CO
Tubérculos, hojas y raíces se alían para eliminar el 96% del monóxido de carbono en 24h. También reduce los niveles de benceno, tolueno y formaldehído. Apta tanto para mucha como para poca luminosidad, agradece los riegos abundantes en veranos calurosos. Es muy útil en cocinas, donde se utiliza gas, y en estancias en las que se reúne mucha gente. Combínala con plantas con un porte en abanico parecido, como juncos o juncias, o para crear contraste junto con rosales y hiedra de hoja pequeña.

 

8. POTOS, DEPURA CASI TODOS LOS TÓXICOS
Como hexano, benceno y, sobre todo, el monóxido de carbono, causante de náuseas, vértigos o cefaleas. Vive bien en salones y despachos, así como en cocinas y dormitorios. Puede crecer como trepadora, si se coloca un tutor, o como colgante, aunque entonces sus hojas son más pequeñas. Colócalo encima de un mueble para disimular las esquinas y hacer la estancia más agradable. Combina varios en una misma repisa y ganarás verticalidad y movimiento.

 

9. HIEDRA, TAMBIÉN PURIFICADORA
La hiedra de hoja pequeña elimina del aire en 24h entre el 80 y el 90% del benceno, presente en plásticos, resinas o fibras sintéticas. Se trata de una planta muy resistente que agradece la humedad y crece como trepadora o en cascada tanto al sol como en semisombra.

 

10. EL CACTUS, JUNTO AL ORDENADOR
Según numerosos estudios, es muy eficaz contra las radiaciones y las ondas electromagnéticas. Colócalo cerca de ordenadores, cableado y otros aparatos, y junto con otros cactus y plantas crasas. Necesitan abundante luz natural y poca agua.

No son solo decorativas, sino también ¡muy saludables! Harán de nuestra casa un lugar más sano, bello y ecológico, ayudándonos a respirar aire puro en nuestra propia casa. Y es que las plantas son fuente de salud.

6. MUEBLES CÓMODOS Y QUE TE GUSTEN, LA ERGONOMÍA MUY IMPORTANTE

 

Pasar un rato trabajando en el sillón con la computadora en las piernas puede ser distinto y cómodo, pero de ninguna manera será el mejor lugar para la oficina en casa. Si en algo debemos invertir tiempo y dinero, es en la elección correcta de la silla y el escritorio.

 

Es muy importante elegir muebles ergonómicos y flexibles que nos permitan trabajar en una postura cómoda, de forma que podamos mantener la actividad y la concentración durante más tiempo. La silla es un elemento esencial para mantener una buena postura, por ello, conviene elegirla con apoyo lumbar incorporado, asientos de altura regulable y funciones de reclinado. También podemos optar por una mesa de altura regulable para trabajar de pie o sentados, alternando de posición durante la jornada.

 

Si las jornadas son extensivas, es mejor elegir una silla de oficina. Pero si los horarios son razonables, basta con que la silla sea cómoda y nos ayude a mantener una buena posición corporal: que recoja bien las lumbares y en la que las piernas y la espalda formen un ángulo recto.

Las medidas básicas para montar la oficina en casa y otras consideraciones que se deben tener en cuenta son:

  •  Ubicar la mesa en un lugar luminoso, mejor de manera natural durante el día.  La fuente de luz no debe provocar reflejos en la pantalla del ordenado.
  • El flexo o lámpara de mesa debe alumbrar por la derecha si eres zurdo y por la izquierda en el caso de los diestros.
  • Procurar que llegue bien el wifi para no desesperarnos con interrupciones en la conexión. Si colocas la mesa cerca.
  • del router se puede usar un cable.
  • El computador debe ocupar la posición principal en la mesa y se colocar frente a uno, se debe colocar la pantalla lo más lejos posible de uno, a una distancia mínima de 40 cm.
  • Un escritorio o mesa de trabajo puede ser alta (tipo bar) o de altura convencional según te guste trabajar en un taburete o silla. Hay determinadas profesiones (como las más creativas y artísticas) que prefieren una mesa alta. Es cuestión de gustos. Lo importante es que se este cómodo. Para trabajar con un portátil bastan 40 cm de fondo para la mesa. Si tienes un ordenador de sobremesa y necesitas consultar libros o apuntes, opta por 50-60 cm. Y en el caso de que manejes planos en tamaño A3 necesitarás un poco mas. Coloca el teclado de tal forma que no esté al borde de la mesa (entre el teclado y el borde de la mesa debe haber al menos 10 cm para apoyar las muñecas).
  • La silla debe ayudar a mantener la postura correcta. Se debe estar cómodo y no forzar ni la espalda ni los hombros (por la altura a la que tienes los brazos si tecleas en el computado). Elegir una silla ergonómica, de preferencia con brazos y ajuste de altura, de que la espalda esté recta y tanto codos como manos se ubiquen a la altura del teclado para no doblar las muñecas mientras se trabaja.
  •  Teclado y ratón deben estar en línea con los codos.
  • Reposar los pies en el suelo ayuda a cuidar la espalda.
  • La cadera debe estar ligeramente inclinada hacia delante, lo que facilita sentarse recto.
  • El escritorio nos permite más libertad de elección en cuanto al diseño, tamaño y funcionalidad. Si no se tiene mucho espacio para estanterías o librerías, se puede elegir escritorios con cajones, o con puertas. En cambio, un escritorio con caballetes aporta más ligereza visual y puede ser ideal si se tiene que crear la oficina compartiendo espacio en el salón.

Puede que los primeros días concentrarte tal y como lo haces de forma cotidiana en la oficina sea todo un reto, en especial si no acostumbras trabajar desde casa. Usemos el diseño a nuestro favor y evitemos establecer la oficina en casa en un lugar donde la televisión quede frente a nosotros.

 

Trata de que tu escritorio se encuentre lejos de la cama o sillón, pues la tentación de tomar un breve descanso puede traicionarnos. Además, si puedes evitar el ruido de las personas con quienes compartes el hogar, se tendrán asegurados largos periodos sin distracciones y seremos más eficiente.

 

Puede parecer que trabajar en casa tiene muchas ventajas: ser su propio jefe, administras (más o menos) el tiempo como se quiera, no se encuentra tráfico para ir a las oficina… Pero también existen muchas distracciones que pueden afectar nuestro rendimiento laboral como interrupciones espontáneas del tipo “Perdona, ¿sabes si hay más harina?” o “Mamá, papá, ¿cuándo vas a jugar con nosotros?”.

 

Porque trabajar en casa no es sinónimo de hacer hasta tres cosas a la vez. Por eso es muy muy muy importante tener un rincón de trabajo que nos aisle de todo y aún más importante que lo tengamos interiorizado: cuando se trabaja, trabaja. Y punto.

 

Si se tiene espacio, lo ideal es tener una habitación que se convierta en tu lugar de trabajo, es decir, en la oficina. Se va a pasar mucho tiempo entre esas cuatro paredes así que se tiene que estar cómodo y crear un ambiente que facilite la creatividad y la concentración. Colores como el verde y el azul ayudan a aumentar la productividad y tienen un efecto relajante.

 

Dedica un poco de tiempo a crear tu espacio ideal, una oficina o estudio, como le quieras llamar, donde nos sintamos inspirados, que nos invite a trabajar productivamente y sin distracciones.